No quiero ser tu media naranja
Si me quieres, amor, quiéreme entera
porque no voy a partir en dos
el mascarón de proa de mi barco
ni a buscar la mitad de mí en el arcano de tu cuerpo.
Despierto en la tierra de nadie
donde vive la melancolía y pongo en hora al sol,
redondo como una fulgurante bola de fuego
para que te devuelva entera la mañana.
No busques
no quiero saber nada de tus secretas obsesiones
ni de las carencias que te han crecido en el calendario
de las horas,
no me pidas a mí lo que te falta,
porque no se escribe así el menú de nuestros besos.
Quiero que llegues a mí entero como una naranja,
redondo como un pensamiento, capaz como un deseo.
Y yo misma,
que no me atrevo a hacer el balance de mis deudas
ni a contabilizar la multitud de mis carencias,
te ofrezco mi ser entero como una naranja,
redondo como un pensamiento, capaz como un deseo.Por eso, atrevida, saludo al sol cada mañana,
lo pongo de despertador en la cabecera de tu cama
y me sumerjo desnuda en el río de sangre de tus venas,
para llenar de flores el ojal de tu camisa
porque no quiero ser tu media naranja.
Si me quieres, amor, quiéreme entera.
Los ojos de la lluvia
Isabel Medina
No hay comentarios:
Publicar un comentario